jueves, 12 de febrero de 2009

Ayy la posmodernidad...

Para ver otro ejemplo de cómo podemos ser ridículamente específicos en el dominio de la vida cotidiana, vayamos al lujoso Reebok Sports Club de New York, y fijémonos en el número de personas qué, luego de subir varios pisos en ascensor, se dirigen enseguida al aparato que simula las escaleras
Nassim Nicholas Taleb, "El Cisne Negro"